Introducción
Ahorrar energía significa reducir su consumo consiguiendo los mismos resultados que gastando más. Disminuir el gasto de energía comporta muchos beneficios, ahorra dinero y protege el medio ambiente. Generar energía supone beneficiarse de unas fuentes naturales preciosas como el carbón, el petróleo o el gas.
En Internet hay muchísimas páginas informativas que proponen ideas para ahorrar energía. Algunas propuestas son:
- Cambiar el medio de locomoción, utilizar más el transporte público, o si es posible dejar el coche e ir a pie o en bicicleta
- Reducir la calefacción de la casa 1ºC, cerrar las ventanas mientras haya calefacción, llevar ropa cálida
- Elegir productos con envases que pesen poco
- Apagar las luces y los enchufes cuando no se utilicen, utilizar bombillas de bajo gasto energético
- Reutilizar las bolsas de plástico (para ir a la compra, etc)
- Usar el microondas en lugar del horno para calentar la comida
- Utilizar pilas recargables en lugar de desechables
Actualmente el uso de la electricidad es fundamental para realizar gran parte de nuestras actividades; gracias a este tipo de energía tenemos una mejor calidad de vida.
Con tan solo oprimir botones obtenemos luz, calor, frío, imagen o sonido. Su uso es indispensable y difícilmente nos detenemos a pensar acerca de su importancia y de los beneficios al utilizarla eficientemente.
El ahorro de energía eléctrica es un elemento fundamental para el aprovechamiento de los recursos energéticos; ahorrar equivale a disminuir el consumo de combustibles en la generación de electricidad evitando también la emisión de gases contaminantes hacia la atmósfera.